Puente

Así es. Hoy lunes no era lectivo... por lo menos en Madrid. Y el día que se suponía un servidor debía haberlo pasado estudiando Historia, lo ha pasado tocándose los cojones como buenamente hay que decir. Y es que la tecnología es mala, muy mala. Quien me iba a decir a mi que el que por fin consiguiera un ordenador en mi cuarto (hay que arreglar el tema del internet, porque va, como quien dice, pisando mierdas) iba a servir para que me pasara el día haciendo mis chanchullos pa tenerlo optimizado, en vez de preocuparme por un examen que tiene pinta de ser de los jodidos. Haber si suspendo y me sirve para ponerme las pilas más adelante, que a tortazos es como mejor se aprende. El caso es ese, que tengo ordenador, y que me he pasao el día metiéndome la música por donde buenamente me cabía (vía puerto usb 2.0). Y he escuchado una de esas canciones que te ensalzan el alma (o hace que se le hinche a uno el pecho, si somos un poco más escépticos). Es de Johnny Cash (The man in black), no sé si se le conocerá, pero es un gran músico, sobre todo de country y gospel. El caso es que esta canción es de esas pocas que dejan en blanco, sin permitir hacer otra cosa que escucharla: Hurt